Nelson Gimón.- Las recientes inundaciones provocadas por las fuertes lluvias registradas durante los últimos días en el oeste de Alemania y el sur de Bélgica han empeorado en las últimas horas, y, por el momento, han dejado un saldo de 129 muertos y miles de desaparecidos.
Autoridades alemanas informaron este viernes que al menos 103 personas han muerto en los estados de Renania del Norte-Westfalia y Renania-Palatinado, los cuales a su vez son los más afectados del país (más de 63 y 43 fallecidos, respectivamente), confesando a su vez que tienen el temor de que haya más víctimas.
Asimismo, se ha confirmado que unas 1.300 personas continúan en paradero desconocido (aunque se presume que muchas de ellas, si no todas, podrían estar de vacaciones).
Más allá de lo que son víctimas mortales y desaparecidos, las inundaciones han provocado graves destrozos en vías y puentes, así como problemas en la red de telefonía móvil, lo que ha dejado a la población de la zona incomunicada.
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Palabras de las autoridades
La canciller alemana, Ángela Merkel, trasladó su palabra de pésame a las víctimas y familiares, expresando que está ‘impactada por los informes de que hay lugares que están completamente bajo el agua’. “No sabemos el número todavía de víctimas y afectados, pero habrá muchos”, lamentó.
Por su parte el ministro principal de Renania-Palatinado, Malu Dreyer, ha aseverado que el alcance exacto del desastre aún no es previsible, que el sufrimiento sigue aumentando, y que es necesario tomar medidas para frenar el cambio climático pues, a su juicio, esta es la causa de la tragedia.
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Inundaciones históricas en Bélgica
El temporal que ha enlutado a Alemania también está afectando a Bélgica, país donde ya han fallecido unas 23 personas y se encuentran desaparecidas varias decenas.
Medios locales apuntan que en la región de Valonia, en el sur del país, unos 41.000 hogares se han quedado sin suministro eléctrico, por lo que las autoridades han anunciado la liberación de fondos de emergencia para ayudar a las poblaciones afectadas.
El primer ministro belga, Alexander de Croo, dijo este viernes que procedería a declarar el 20 de julio como día de luto nacional en recuerdo a las víctimas de las inundaciones, a la vez que lamentó que la perspectiva es que la situación empeore.
“Todavía estamos esperando el recuento final, pero podría ser que estas inundaciones sean las más catastróficas que haya conocido nuestro país”, espetó, agregando: “Estas son circunstancias completamente excepcionales, sin precedentes”.
(Con información de EuropaPress)
